Los discursos parlamentarios de Práxedes Mateo-Sagasta

El Sr. Presidente del CONSEJO DE MINISTROS (Sagasta): Pido la palabra.

El Sr. PRESIDENTE: La tiene S. S.

El Sr. Presidente del CONSEJO DE MINISTROS (Sagasta): Me parece que el Sr. Martín Sánchez no está en toda la exactitud al decir que yo no contesté a su pregunta relativa a la reorganización de los servicios, porque, si no recuerdo mal, paréceme que al contestarle me ocupé de la reorganización de algunos servicios y de las reformas que se están llevando a cabo en algunos Ministerios, a propósito precisamente de la reforma de los servicios, porque S. S. negaba que se hubiera reformado nada, afirmaba que no se había hecho nada, y a eso le respondía yo diciéndole: ¿No se ha hecho nada en el Ministerio de la Guerra? ¿No se ha hecho nada en Marina?¿No se ha hecho nada en Hacienda y en los demás Ministerios? Pues eso es reorganización de servicios y reforma de servicios. Ahora mismo acaba de leer el Sr. Ministro de la Guerra nada menos que tres proyectos reorganizando servicios militares, aquí está pendiente de dictamen una gran reorganización de los servicios de Marina, está pendiente de resolución otra gran reforma en ese mismo Departamento, relativa a los arsenales, y en Hacienda se han hecho reformas de los servicios en la parte interior de la administración, hasta el punto de que la distribución de todas las funciones del Ministerio de Hacienda son distintas de las que antes había. Lo mismo se ha hecho en Gobernación.

De manera, que no sólo se han presentado ya reformas a los servicios, sino que se vienen presentando, y no se han presentado antes todas porque era inútil que así se hiciera por las razones que entonces di y que recordará el Sr. Martín Sánchez, pues lo que entonces corría verdadera prisa, porque había de hacerse a fecha fija, era la aprobación de los presupuestos, que nos tenía verdaderamente embarazados. Pasó aquello, y ya entretendremos a las dos Cámaras, al Congreso y al Senado, con todos los proyectos de ley que tienden a mejorar los servicios, y a reformarlos, por consiguiente, en todo los Departamentos.

Como yo no esperaba la pregunta del Sr. Martín Sánchez, aunque siempre que vengo al Senado debo esperar alguna pregunta de S. S., puesto que siempre que acudo a esta Cámara se le ocurre hacerme alguna, y cuando no vengo me dice que venga para hacérmela, cosa que no me pesa, porque tengo mucho gusto en discutir con S. S., pero en fin, como no esperaba, repito, la pregunta que S. S. ha tenido a bien hacer esta tarde, no he podido traer una lista completa de las diferentes reformas que hemos hecho en todos los Ministerios.

Sin embargo, no tiene S. S. más que examinar todo lo que ha hecho el Congreso y el Senado y todo lo que además ha publicado la Gaceta, para que S. S. salga del error en que estaba, suponiendo que el Gobierno no ha hecho nada. No, no es así; el Gobierno ha hecho todo lo que el tiempo y el espacio le han permitido hacer y todo aquello también, que la prudencia determina, porque no es cosa de hacer [2214] reformas de servicios públicos de repente y en un solo día; hay necesidad de ejecutarlas poco a poco, haciéndolas depender unas de otras, porque todas tienen alguna relación y no se pueden hacer de una manera aislada.

Así, pues, yo espero que S. S. se conformará con las explicaciones que le he dado, y si no está conforme, yo le aseguro que otro día traeré más datos respecto de todo esto que acabo de decir, y los traerá de una manera más clara, a ver si el Sr. Martín Sánchez se conforma.